Set List de la Noche:
The Lamb Lies Down on Broadway
Fly on a Windshield
Broadway Melody of 1974
Cuckoo Cocoon
In The Cage
The Grand Parade of Lifeless Packaging
Back in NYC
Hairless Heart
Counting out Time
The Carpet Crawlers
The Chamber of 32 Doors
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Lillywhite Lilith
Anyway
The Supernatural Anaesthetist
The Lamia
Silent sorrow on empty boats
The Colony of Slippermen
Ravine
The Light Dies Down on Broadway
Riding the Scree
In the Rapids
it
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Watcher of the skies
Firth of fifth
The return of the giant Hogweed
Pasadas las 22:15 se sube al escenario de la sala grande de la Piedra Feliz la banda Old Michael, en su debut porteño. Aplausos alegres los reciben. Mientras los músicos preparan sus equipos Olegario Hernández saluda a la concurrencia, introduce la banda y expone su plan para la noche: tocar "The Lamb Lies Down On Broadway completo". Y así cuenta la historia del disco a una interesada audiencia. "Esta es la historia de Rael", concluye, como si fuesen esas las palabras mágicas que gatillan la emocionante obertura, a cargo de los virtuosos dedos de Felipe Ábrigo. Y comienza la noche mágica.
Sin problemas, con un sonido espléndido, calibrado, que permite oir los detalles, el concierto muestra las joyas musicales una por una. Desde el comienzo hasta It, todo está lleno de apasionados momentos: carpet crawlers levanta a la gente de sus asientos, quienes acompañan inspirados con los estribillos. Pareciera que "we gotta get in to get out" fuese el himno de la noche. Jorge Sánchez está muy alerta y fino con los solos en Supernatural, en Lamia. Rodrigo Marambio marca el ritmo, sobresaliendo su acompañamiento en In the Cage y The Waiting Room. Ariel Russell, concentrado, decidido, se echa al hombro la responsabilidad rítmica y las explosiones de cada tema. Es fantástico el éxtasis que propone en Firth of Fifth, cuando la noche ya empieza a concluir. Felipe Ábrigo, dueño de la estructura musical, enmarca a los demás, y fluye de manera espectacular.
Una noche sorprendente. El Slipperman aparece y asusta al personal de La Piedra, que no entienden que la figura es parte de una leyenda. El escenario se amplía, se llena y así se cierra una noche con la máxima energía. Una notable versión de Watcher of the skies anuncia la despedida, pero es sucedida por Firth y al final por The return of the Giant Hogweed, canción de despedida y cierre. El abrazo ritual de los músicos sobre el escenario es ahora una postal del debut de Old Michael en Valparaíso.
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